03 diciembre 2023

Inglés, cosa sabida

Se me ha ocurrido escribir sobre esto cuando he leído en mi tubo de pasta Colgate SAVE WATER turn off the tap while brushing. No acabo de entender si esa distinguida marca está interesada en que ahorren agua solamente los que hablen inglés. De lo contrario, ¿por qué en esa lengua en un envase destinado a la venta en España y Portugal? Les da lo mismo que usted gaste mil litros, solo quieren quedar bien con sus paisanos.

No es únicamente eso: en la parte delantera del tubo se dice “Complete protection for a healthy mouth”, con lo que aparentan que solo les preocupa suministrar esa información a los que entiendan ese mismo idioma. ¿Saben lo que ocurriría si en EE.UU. un producto español (un milagro) escribiese sus textos en nuestra lengua? Es fácil: que no se vendería en absoluto, no lo comprarían ni los hispanos.

Estamos rodeados de palabras y expresiones en inglés y no es eso lo peor: la gramática inglesa –sí, parece ser que existe− está siendo adoptada por los hablantes de nuestra lengua y son numerosos los ejemplos. Uno podría ser la desaparición del artículo en expresiones partitivas como “la mayoría de (los)”, “el resto de (los)”, “la mitad de (los)”, etc. También otras como “a corto/medio/largo plazo” que si usted quiere ser elegante, ahora debe decir “en el corto/medio/largo plazo”, e incluso he podido oír la palabra ‘término’ en vez de ‘plazo’, con lo que se remata la traducción literal del inglés (in the short/medium/long term).  

¿Y qué me dicen de lo de Black Friday? En España estamos encantados, porque cumple el doble objetivo que persiguen nuestras vidas, gastar dinero y hacer como que hablamos inglés. Como es natural, los comercios fueron los primeros en sumarse a esta moda, porque a ellos les da lo mismo tener que hablar tagalo si con eso venden más. Hay que tener en cuenta que en nuestro país la mayoría de los emprendedores lo que hacen es poner establecimientos de hostelería, bar, chiringuito, restaurante, etc.

La última mamarrachada es el Día de Acción de Gracias, Thanksgiving Day en versión original. Se está implantando en nuestra tierra siguiendo esa tendencia a la aceptación entusiasta de la colonización cultural. En su lugar de origen se celebra el cuarto jueves de noviembre para conmemorar el desembarco de los peregrinos (ellos los llaman así, pilgrims, aunque no sean más que aventureros emigrantes) desde el Mayflower en Plymouth (Massachusetts) en 1620. Con ello se les rinde homenaje a quienes llegaron "para la gloria de Dios, y el avance de la fe cristiana y el honor de nuestro rey y patria'', aunque su primer trabajo fue cargarse a todos los seres de dos patas que poblaban el territorio que iban controlando. Por increíble que parezca, son muchos los países que copian esta celebración y en Brasil, que tanto debe a los estadounidenses (?), existe hasta una ley (Ley 5110) que instaura la celebración incluso el mismo día que el original. Puede ser que agradezcan que aquellos no llegaran hasta allí en la eliminación de nativos, porque otra razón no consigo encontrar.

De verdad, ¿a usted le parece lógico que nos anuncien en televisión un café con las palabras "What else!", que la mayoría de las marcas de automóviles nos lancen sus eslóganes en inglés, que los perfumes franceses se nos anuncien en inglés, que en televisión haya esa profusión de frases y expresiones en inglés? Realmente todos sabemos que si hacen eso es porque ese idioma tiene en España un prestigio inmerecido y ese prestigio se contagia a lo que nos quieren vender. Somos bastante tontos.

Que nadie me malentienda: no he sido exhaustivo y creo que es bueno aprender y hablar inglés, pero su uso debe estar limitado a los lugares del extranjero donde se precisa. En España sería adecuado hablar español, que es el idioma que entendemos todos (incluso los que disimulan).

No hay comentarios: